cuidamos tu inversión
Cuando el aportante de la tierra y la empresa constructora son personas distintas, la finalidad de este contrato es verificar que se construya el desarrollo inmobiliario y se cubra a cada una de las partes su contraprestación tanto por el terreno como por las construcciones.
Así el desarrollador no tiene que hacer una compra venta y el dueño de la tierra tiene asegurada su inversión.
En caso de que alguna de las partes incumpla con sus obligaciones se podrá llevar a cabo la reversión de los bienes y o la venta de los mismos para cubrir las obligaciones garantizadas.
Adicionalmente este instrumento sirve para garantizar créditos que se obtengan para la construcción.